Autor: Vigil

Pareja de esposos que esperaban un bebé fueron asesinados por la extorsión, sus nombres Manuel Méndez de 19 años y su esposa Alinot de 18 años, quien estaba embarazada de 4 meses, fue asesinada a tiros por un grupo de extorsionadores en el sector San Ramón, municipio de San Francisco, después de que sus padres se negaran a pagar la vacuna exigida por los delincuentes.
El atroz crimen tuvo lugar en la madrugada del lunes 20 de marzo, dentro de su residencia en la Villa Lago Sur, diagonal al Materno de San Francisco, donde ambos vivían después de huir del municipio de La Cañada de Urdaneta.
La pareja cerró su negocio de comida rápida «La Cocina de Dios», recientemente inaugurado por la segunda redoma de La Coromoto, a las 2:00 a.m. y regresaron a casa. Sin embargo, una vez allí, un par de sicarios los sorprendió y les disparó a quemarropa hasta acabar con sus vidas.
Según las investigaciones, la pareja huyó de la casa de sus padres en La Cañada de Urdaneta después de que se les exigió el pago de una vacuna. Este es un delito común en la región, donde los delincuentes extorsionan a los propietarios de negocios y a las personas para obtener dinero. En este caso, la pareja decidió huir para salvar sus vidas, pero desafortunadamente, los criminales los encontraron y los asesinaron.
La comunidad local está profundamente conmocionada y preocupada por la creciente ola de violencia y crímenes en la región. La policía está trabajando arduamente para identificar y capturar a los responsables de este atroz asesinato.
Este trágico suceso es una llamada de atención para las autoridades y la sociedad en general sobre la necesidad de fortalecer la seguridad y tomar medidas efectivas para combatir la delincuencia y la violencia en el país. También destaca la importancia de proteger y garantizar la seguridad de las personas que están siendo amenazadas por los delincuentes y luchan por sobrevivir en condiciones precarias.
Una vacuna es un cobro extorsivo de dinero que exigen delincuentes o grupos organizados para garantizarles “seguridad y protección para que puedan trabajar de forma tranquila”.

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